Habitaciones de buen tamaño y bellamente decoradas con tanto una ducha como un cuarto de baño privado. La ubicación del hotel era cómoda en el desierto. Lo bueno fue que estaba a 1 km del Jazz'o, que sirve comida rápida.

Pasamos un rato realmente bien en ese hotel precioso. El personal y los propietarios fueron todos bastante amigables. Tenía una ubicación excelente, a una distancia cercana del Jardín Majorelle. El restaurante, que por cierto era maravilloso, ofrecía comida marroquí.

Era un lugar muy limpio, el personal era muy amigable y agradable, y me ha encantado mi habitación de buen tamaño. Las camas eran cómodas, y había un minibar, un horno de microondas y una zona de estar en la habitación. Su ubicación era perfecta lo suficientemente cerca de del centro y de todas las principales atracciones turísticas y también del centro de la ciudad vieja. Cerca estaba el bonito local Cafe Bousafsaf con bebidas calientes. Vistas a la calle, y servicios excelentes. El WiFi gratis era de lujo. Gracias por esta experiencia especial, recomendaría a todos este lugar.

El desayuno era sabroso y delicioso y había una gran variedad de opciones. El servicio recibido allí era útil.

El Riad tiene una ubicación ideal, cerca del centro y en un barrio auténtico de la Medina. Además, se encuentra cerca de un mercado donde se puede disfrutar del día a día de los lugareños. La atención del personal es excelente y siempre están dispuestos a ayudar. El desayuno es delicioso y abundante. Las habitaciones cuentan con aire acondicionado, baños limpios y agua caliente.

Aunque el wifi funciona bien en la mayoría de las áreas, puede haber momentos en los que la señal sea débil en las habitaciones.

Las camas eran cómodas, la habitación bien decorada y perfecta. El servicio era útil, como esperábamos.

La habitación en sí era bien equipada y bien decorada con un cuarto de baño ensuite y con una ducha.

El Riad Mahjouba es un lugar encantador y acogedor, con habitaciones cómodas y una decoración auténtica que te sumerge en el espíritu de Marruecos. El personal es amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. El té de bienvenida y las delicias caseras son un toque especial. La ubicación en una zona tranquila de la Medina es perfecta. El desayuno tradicional marroquí es delicioso y abundante.

Me sentí como en casa, no tengo ninguna pega.

Ubicación: el hotel estaba cerca de varios lugares, como el centro y el centro de la ciudad vieja. Cenamos en La Perle Blanche, que estaba relativamente cerca del lugar. La comida era increíble, había una cantidad enorme de opciones.

No me gustó el personal, algunos eran inútiles.

Una habitación bonita y perfecta, además había WiFi gratis. Cama cómoda y baño bonito. La ubicación es fantástica, está a unos 10-15 minutos a pie del Jardín Majorelle. Todos los servicios me parecieron útiles.

Riad acogedor, habitaciones cómodas, personal amable y atento, desayuno delicioso.

No hay nada que no me gusta.

En dos palabras, es un hotel precioso en una ubicación bonita.

Me encantó mi estancia en este alojamiento típico en Marruecos. El personal era muy amable y servicial, siempre dispuesto a ofrecer ayuda. Además, el desayuno era delicioso y variado, con bebidas calientes y tortitas marroquíes.

La habitación en sí era bien equipada y bien decorada con una ducha y un cuarto de baño ensuite.

El personal fue muy atento y simpático, siempre intentando ayudarnos en todo. Las habitaciones estaban muy limpias y contaban con aire acondicionado y un buen baño con agua caliente. El desayuno típico de Marruecos era sabroso y saciante. Nos sentimos como en familia, preocupados por nuestra seguridad, nos acompañaron en la búsqueda de un restaurante por la noche. La ubicación en un barrio tranquilo a solo 15 minutos a pie del zoco fue muy recomendable. Es una joya dentro de la medina, y realmente volvería por la amabilidad del personal.

Recomiendo este hotel, es total.